En todo contexto de trabajo, independientemente del grado de responsabilidad que tengamos, estamos expuestos a cometer un error en nuestro qué hacer diario, el cual puede suponer consecuencias negativas tanto para nuestras/os compañeras/os como para la empresa. Desde empleorecursos.es queremos tratar la forma de afrontar los errores en el trabajo de forma constructiva, haciéndoles frente y superarlos.
“Un error es un suceso común en el contexto laboral, ya sea por descuido o por realizar algo que no conocemos”.
En primer lugar, debemos partir de la idea de que la perfección de manera permanente no existe, por lo que es normal que ocurran errores en nuestra labor profesional (ya sea por un descuido o por intentar cosas nuevas que desconocemos). Dependiendo de la gravedad de los mismos, estos errores producen en la persona que los ha cometido una elevada sensación de estrés y malestar, de ahí la importancia de aprender de ellos, superarlos y evitar que no vuelvan a suceder.
“La mejor forma de evitar la sensación de estrés que produce un error laboral es reconocerlo, disculparse, mitigarlo y evitar que vuelva a suceder”.
Como se ha señalado, entendemos que los errores son actos normales que suceden en el ámbito laboral, por lo que ante ellos, lo más importante es la actitud que se toma para hacerles frente, así como el modo de presentar una solución viable para continuar adelante, es decir, actuar con Inteligencia Emocional.
“El primer paso para enfrentarse a un error es reconocer que somos los culpables”.
En empleorecursos.es entendemos que una vez detectado el error, el primer paso es ser honestas/os y asumir que somos la persona responsable del mismo. Escurrir el bulto o negarlo solo empeoraría las cosas al alargar la posible solución en el tiempo, es decir, lo mejor es reconocerlo y enfrentarse a él de forma activa.
“Detectado el error, lo mejor es reflexionar unos instantes sobre el mismo y las acciones a acometer a corto plazo para subsanarlo”.
Reflexionar durante unos instantes sobre la situación nos ayudará a crear un plan de acción, así veremos con perspectiva las primeras acciones a emprender con objeto de subsanarlo, esto es, la persona adecuada a la que acudir para comentarlo y empezar a hacerle frente (jefas/es, compañeras/os implicadas/os, clientes, etc.). Pensamos que esta segunda fase, si es sincera y rápida, no solo ayudará a amortiguar el daño causado, sino que demostrará nuestra capacidad para resolver problemas y salvaremos en gran medida nuestra reputación minimizando los efectos sobre la confianza que nos tienen en el trabajo tanto compañeras/os como responsables.
“Las disculpas deben ser sinceras, a la vez que daremos las explicaciones necesarias y asumiremos las consecuencias que se deriven”.
Para ello, nos disculparemos de forma sincera con todas las partes implicadas reconocimiento nuestra culpabilidad a la vez que explicamos los motivos que nos llevaron a cometer la equivocación de forma clara y transparente (sin excusas), asumiendo y aceptando en primera persona las consecuencias que se deriven del mismo. En empleorecursos.es entendemos que la única vía existente para comenzar a solucionar el error es reconocerlo y asumir la responsabilidad de lo ocurrido.
“De todo error cometido debemos aprender para crecer profesionalmente”.
Llegado a este punto es el momento de analizar qué se hizo mal a fin de evitar que vuelva a suceder, tener una actitud constructiva y proactiva. El error, si aprendemos de él, nos hará mejores profesionales aportándonos un mayor crecimiento personal. En caso negativo, podría afectar al rendimiento profesional. Sin embargo, dependiendo tanto de la gravedad del mismo como de la persona, el grado de afectación del mismo variará, por ello, en empleorecursos.es recomendamos no atormentarse en demasía ni rendirse, a la vez que tener presente que todo el mundo comete errores (no eres la única persona que lo ha hecho, y a buen seguro, no serás la última), por lo que es adecuado tomarse un tiempo prudencial para reflexionar sobre el mismo y saberse perdonar por lo ocurrido, con objeto de “mirar hacia delante aprendiendo de la situación”.
“Es fundamental afrontar el error con objeto de que no afecte a nuestra confianza laboral ni a la pasión con la que realizamos nuestro trabajo”.
En resumen, hay que recuperarse pronto de la caída, aprender, levantarse y seguir trabajando con más motivación que antes, esto es, que el error no destruya tu confianza como profesional ni la pasión con la que afrontas tu trabajo, ya que si has sido una persona honesta reconociendo el mismo, abierta explicando los motivos y pidiendo disculpas, responsable asumiendo las consecuencias y proactiva para poner medios que eviten que vuelva a suceder, has hecho todo lo que podías para mejorar la situación por lo que este suceso no puedes dejar que afecte a tu vida laboral futura.