Uno de los aspectos comunes de las empresas exitosas, en contra de lo que pueda parecer, es que comparten el conocimiento entre todas las personas que las integran. Esto es, no se limitan a pasarse información, sino que van más allá, al instaurar una auténtica cultura de conocimiento.
En empleorecursos.es consideramos que son múltiples los beneficios que produce en la empresa compartir el conocimiento, como una considerable mejora en el rendimiento individual y colectivo, aumento del compromiso de las y los trabajadores, posibilidades de desarrollo profesional, o mayor calidad en el servicio prestado, entre otros.
Factores que determinan intercambio de conocimiento en la empresa
A partir de nuestra experiencia gestionando departamentos de talento, podemos afirmar que son varios los factores que determinan el intercambio de conocimientos en la empresa como la Cultura Organizacional, ya que cuando las y los líderes establecen prácticas que fomentan el intercambio de conocimientos, la motivación de las y los trabajadores para intercambiar conocimientos. Dentro de este contexto, es necesario reconocer y recompensar la comunicación abierta, así como un entorno seguro en el que los errores se consideren oportunidades de aprendizaje; la infraestructura adecuada como intranets, plataformas, gestores documentales, etc.; los canales de comunicación formal e informal; o los programas de formación y desarrollo.
Sin embargo, cuando hablamos de compartir conocimiento en la empresa, lo hacemos de una manera muy general. Por ello, para sintetizar la cuestión, es útil mencionar que son tres los tipos de conocimiento que se producen en toda organización, como son:
1. Conocimiento explícito
Es tipo de conocimiento más común que se comparte en la empresa, ya que está formado fundamentalmente por información documentada (manuales, informes, oficios, guías, videos, etc.). Por ello, es muy útil en los procesos de On Boarding o adaptación a un nuevo puesto de trabajo.
2. Conocimiento implícito
Consiste en la aplicación práctica del conocimiento explícito, por lo que tiene una importancia vital en la empresa, al determinar el cómo y por qué se realizan determinados procesos. La mejor forma de compartir este tipo de conocimientos es por medio de la creación de una cultura de aprendizaje e intercambio, así como programas de capacitación en el puesto de trabajo, mentoring, etc.
3. Conocimiento tácito
Es la suma de los tipos de conocimiento anteriores, el implícito y explícito, es decir, abarca los conocimientos y la experiencia acumulada por las y los trabajadores a través de su historias profesionales y personales, a menudo adquiridas antes de unirse a una organización específica. Para generar este tipo de contenido es adecuado crear materiales con instrucciones o pautas basadas en experiencias anteriores, programas de supervisión o seguimiento, etc.
En resumen, establecer una cultura de intercambio de conocimiento verdaderamente efectiva es algo que lleve tiempo y lo más importante, aceptación por parte de todas las partes que componen la organización.